En lo que va del año aumentó un 31,5%, según un trabajo sobre pérdida de competitividad en el campo realizado por Aniceto Chambrillon.
Con la última suba del 10% del gasoil autorizada en
mayo y del 31,5% acumulada desde diciembre, el campo deberá pagar cerca de
2.000 millones de dólares de más en el año, lo que ya ha provocado un fuerte
impacto en el proceso productivo del sector agropecuario que diluye las dos
medidas iniciales macro como la devaluación y la eliminación/baja de
retenciones.
Así lo afirma un informe de coyuntura elaborado por
el especialista en economías regionales Aniceto Chambrillon para la consultora
CPS Comunicacion, denominado “El impacto del aumento del gas oil en el campo”.
En su trabajo, Chambrillon desarrolla un análisis
referido al aumento del combustible y su impacto en la planificación anual y en
el cálculo de rentabilidad de los productores, además de ensayar algunas
propuestas para mejorar la competitividad.
¿Cómo afectó los costos del transporte el aumento
del 31% del precio del Gas Oil entre diciembre de 2015 y mayo de 2016, en
viajes ida y vuelta?. Por ejemplo, el costo del combustible para un flete de Salta
a Rosario pasó de $11.374 a $14.952: un 31% más. Y si se calculara sobre el
precio real que ronda los $20, el costo es de $16.800.
El costo del combustible para un viaje entre Gral.
Pico y Bahía Blanca, pasó de $4.113 a $5.408. Y de Pico a Rosario aumentó de
$4.654 a $6.118. Mientras que el costo del Gas Oil para trasladar la producción
desde el Valle del Río Negro hasta Buenos Aires pasó de $10.397 en diciembre de
2015 a $13.669 pesos.
El informe destaca tres aspectos vinculados al
aumento del precio del Gas Oil que llevan a la pérdida de competitividad: la
distancia a los nodos de comercialización (el costo del combustible para el
transporte de granos de un productor de Salta es cuatro veces mayor que para
uno que esté a 300 kilómetros); el aumento del costo de los insumos y el tipo y
tamaño de la actividad (el caso del girasol, por ejemplo, en diciembre de 2015
se compraba un litro de Gas Oil con 3,93 kilos, en mayo se necesitaron 4,93), y
la falta de financiamiento, los altos costos y la falta de mercados para las
economías regionales.
Chambrillon sugiere abordar la problemática sector
por sector, teniendo en cuenta el tamaño de las explotaciones, las
características de cada proceso productivo y los ciclos naturales de cada
actividad, con especial atención sobre las economías regionales.
Además, en el recorrido que hace por esta
problemática concluye que la situación exige un paquete de políticas públicas
que contemple las particularidades de cada región. Y propone, entre otras
alternativas para disminuir el costo del
Gas Oil para la producción, la de eliminar la aplicación del impuesto a los
combustibles líquidos (ITC) a determinadas actividades productivas de alta
demanda.
Fuente: http://mobile.infocampo.com.ar/#/n/80736