El CucaiTuc donó equipamiento para el Hospital Padillla,
dependiente del Ministerio de Salud Pública de Tucumán. Un nuevo eco dopler
transcraneal de origen alemán y único en el país, estará a disposición de los
médicos del Siprosa para atender a los tucumanos. El envío del equipamiento se
realizó en reconocimiento al servicio de la Unidad de Procuración del centro de
salud.
El eco doppler transcraneal, es un dispositivo empleado para
observar cómo llega la sangre a la cabeza, su fluidez y cómo trabaja la presión
dentro del cráneo y en las distintas partes de los territorios de las arterias
cerebrales. De esta manera se puede establecer un tratamiento y, si es posible,
en algunos casos de neurotrauma, recuperar la función del cerebro.
El jefe de la Terapia Intensiva II del Hospital Padilla,
Juan Sánchez, comentó: “El doppler es sumamente útil por las características de
pacientes que tenemos. La practicidad de tener un aparato que nos permita hacer
diagnósticos al lado de la cama del paciente sin trasladarlo es algo muy
ventajoso. Podremos ver si la presión en el cráneo está elevada, si la
circulación es adecuada, si es demasiado baja o demasiada alta, y sobre esa
base tomar decisiones terapéuticas sin mover al enfermo”.
El instrumental será utilizado en este efector por las dos
Terapias de Cuidados Intensivos, la Guardia y el Departamento de Procuración de
Órganos del Cucai. En cuanto a los beneficios que este aparato traerá en la
donación de órganos, Sánchez remarcó: “Es muy importante realizar criterios de
muerte cerebral bajo criterio neurológico, porque agiliza y habilita la toma de
decisiones en términos de procuración. Este ahorro del tiempo significa
muchísimo para el paciente que está esperando un órgano”.
El médico de la Unidad de Terapias del Padilla, Patricio
Telario, comentó: “Este aparato va a servir mucho a nuestro equipo porque somos
un hospital de referencia, tanto en el terreno de neurotrauma, patologías
agudas del cerebro, procuración y donación de órganos. Su utilidad será
fundamental para diagnosticar los traumas craneales y cualquier enfermedad con
inflamación o aumento de presión en la cabeza. Además de poder realizar el
seguimiento de los pacientes que son potenciales donantes y el diagnóstico de
muerte cerebral”.
Fuente: Abogados Tucumàn