El gobernador, Juan Manzur, expresó su preocupación por la
situación que atraviesa el sector frutícola, en especial, el de la frutilla y
el arándano, que debe hacer frente a los elevados costos energéticos, algo que
tiene en vilo a los empaques tucumanos.
El Mandatario pidió al Gobierno nacional rever las tarifarias
y expresó que la Provincia acompañará a productores para defender la actividad
que genera miles de puestos de trabajo en el interior tucumano.
De acuerdo a lo informado desde la Cámara de Empresarios,
Productores y Viveristas de Frutillas de Tucumán (Ceprofrut), la situación es compleja
porque es posible que en septiembre deban cerrar los establecimientos que
congelan el 100% de la frutilla y el 80% del arándano de Tucumán.
Manzur dijo que hay políticas económicas nacionales que
necesitan corrección. “Es lo que vengo reclamando. La gente no puede pagar la
luz. Subieron mucho los servicios. Son muy caras las tarifas. Es muy oneroso mantener
en funcionamiento las cámaras de frío. A los empresarios no les dan los números”,
afirmó.
El secretario General de la Gobernación, Pablo Yedlin,
aseguró que con el aumento de tarifas, un dólar planchado y una inflación
sostenida, decrece la rentabilidad de muchos productos de las economías
regionales en general.
“Las industrias que exportan, como la frutilla y el limón en
Tucumán; la manzana y la pera en Río Negro; entre otras, generan mano de obra
intensiva. 40 mil puestos de trabajo en el limón y 10 mil en el sector de la
frutilla y el arándano”, graficó.
Dijo, además: “Pedimos a la Nación reconsiderar esta
situación. Nosotros vamos a ver la posibilidad de generar una tarifa especial,
aunque sea de forma temporaria, durante la cosecha, pero necesitamos el acompañamiento
del Gobierno Central”.
Afirmó que si no se protegen las economías regionales y al
mercado interno, “no vamos a tener el gran país que nos prometieron”.
Fuente: Abogados Tucumán