Los ministros de Desarrollo Social, Gabriel Yedlin, e Interior, Miguel Acevedo, encabezaron la firma de un acuerdo para desarrollar el turismo rural la zona de Amaicha. El convenio prevé además poner en valor la cadena de producción de lana y otros rubros que se desarrollan en los Valles Calchaquíes.
“Firmamos
este convenio de alrededor de $750 mil pesos para adecuar viviendas para el
turismo social y también para financiar la puesta en valor de la cadena de la
lana con recursos, capacitaciones y equipamientos para esquila de ovejas,
lavado, teñido y posterior venta del producto”, detalló Yedlin.
El
desarrollo de la economía social de la zona está orientado a resguardar las
costumbres de los habitantes del lugar. “Tenemos que crecer con desarrollo e
identidad. A partir de las identidades de cada etnia o grupo de inmigrantes se
tiene que consolidar la identidad argentina. Hay muchas colectividades y es
bueno mantener, sostener y respetar”, agregó el ministro.
“Nos
preocupa que cada comunidad del interior tenga su desarrollo. Trabajamos en
conjunto para que los jóvenes de lugar tengan la posibilidad de desarrollarse y
tener una actividad productiva en el lugar donde nacieron, y que abandonar su
jurisdicción sea una opción y no obligación”, sostuvo por su parte Acevedo.
El titular
de la cartera del Interior puso como ejemplo el emprendimiento de la bodega
comunitaria de Amaicha, por la que 40 familias tienen una fuente de trabajo y
dinamizan el turismo y la economía de la zona.
Por su
parte, el delegado comunal de Amaicha, Eduardo Nieva, destacó que el acuerdo
“mejorará la economía familiar de la comunidad y vamos a seguir en esta línea”.
Del acto
participaron también, el coordinador de Microcrédito, Miguel Cerviño; la
directora de Economía Social y Desarrollo Local, Fabiana Sánchez y el
intendente de Tafí del Valle, Jorge Yapura Astorga.
Cerveza de
algarroba
Durante el
recorrido por Amaicha, los ministros visitaron una fábrica de cerveza artesanal
de algarroba. Se trata de un grupo de jóvenes comuneros que llevan adelante el
emprendimiento.
El proyecto
nació en 2011, luego de que los emprendedores egresaran del Instituto de
Enseñanza Superior (IES) anexo Amaicha del Valle. Comenzó a funcionar hace
cuatro años y sus creadores sostienen que la produccuión crece mes a mes.
Enzo
Balderrama, uno de los fabricantes de cerveza “La Ñusta”, sostuvo que “fue una
experiencia importante hablar con la gente de los ministerios y que prueben
nuestra cerveza de algarroba”. La planta produce hasta 60 litros por semana, y
con que el apoyo que les brindará el Estado la producción podría llegar a los
190 litros por semana.
Los jóvenes
explicaron que para producir la cerveza se juntan las vainas de algarroba que
luego son lavadas, seleccionadas y molidas. “Así obtenemos la cascarilla y la
harina, que tamizamos. La cascarilla la utilizamos para elaborar la cerveza
mientras que la harina la vendemos aparte”, concluyó.
Fuente: Abogados Tucumán