La oposición logró dictamen y su proyecto para bajar el IVA
en los servicios públicos se votaría el miércoles en Diputados. Cambiemos buscó
trabarlo y Peña dijo que Macri no lo piensa convalidar.
El oficialismo no pudo frenarlo. Los diputados del peronismo,
la izquierda y otros bloques opositores cerraron este miércoles la discusión en
la Comisión de Presupuesto sobre su proyecto para limitar los aumentos de
tarifas de servicios públicos. Aunque se abrió una polémica con el interbloque
de Cambiemos -que presentó un contraproyecto de rechazo a que el Congreso
legisle sobre tarifas- sobre qué dictamen obtuvo más firmas, la iniciativa
quedó en condiciones de ser votada el próximo miércoles.
Con el antecedente de la sesión especial que reunió sobrado
quórum la semana pasada -aunque el proyecto no se aprobó porque requería
mayoría especial al no tener dictamen- , el oficialismo parecía resignado a la
media sanción. Y con pocas esperanzas de poder negociar con los gobernadores
peronistas para frenar la ley en el Senado, ayer Marcos Peña anticipó que la
ley “sí sale así, terminará siendo vetada” por el Presidente. De hecho,
Mauricio Macri reunió a su mesa chica para analizar en Olivos los costos
fiscales del proyecto opositor: el Ministerio de Energía y los técnicos de la
UCR coinciden en que serían superiores a los $ 100 mil millones este año y algo
más en 2019.
Durante el debate en comisión y saliendo al cruce del
radical Luis Pastori, el massista Marco Lavagna -autor del proyecto junto al
justicialista Diego Bossio- acusó al Gobierno de inflar los números y “asustar”
a los gobernadores con el costo fiscal de reducir el IVA.
Según Lavagna la reducción del IVA es de menos de $ 7.000
millones anuales, de los cuales $ 3.500 millones recaerían sobre las provincias
(si es que modifican el texto en el recinto, porque el dictamen señala que todo
el costo fiscal “deberá ser soportado por el Estado nacional”).
La oposición aseguró haber obtenido el dictamen de mayoría,
por 51 votos a 47 (de Cambiemos) en la sumatoria de las tres comisiones que
trataron el proyecto: Obras Públicas y Defensa del Consumidor (la semana
pasada), y ayer en Presupuesto (donde Cambiemos tuvo ventaja de 23 a 22). Así
lo sostuvieron tanto el jefe de la bancada del FpV, Agustín Rossi, como Bossio,
quien dio a entender que para mantener esa suma dejaron para el debate en el
recinto los cambios sobre el IVA que habían planeado.
Cambiemos buscaba imponer otro criterio: no contar más de un
voto delos diputados que integran más de una comisión, para tener su dictamen
de rechazo como mayoritario. Fue una maniobra planificada, porque el viernes
pasado hizo el trámite de reemplazo de tres diputados que integraban la
Comisión de Presupuesto. Así, voceros “cambiemitas” contaban 43 votos a 41.
Más allá de la decisión que tomen las autoridades de la
Cámara, no cambiará el destino del proyecto. La definición del dictamen de
mayoría determina el orden de tratamiento en el recinto. Si no es aprobado el
de mayoría, se tratan los de minoría.
Como sea, no hubo sorpresas en Presupuesto, donde su
titular, el macrista Luciano Laspina, sugirió sin éxito esperar un informe de
la Oficina de Presupuesto del Congreso. Un dato fue la dureza del arco opositor
para plantarse frente a la política tarifaria del Ejecutivo. El FpV acompañó
con disidencias, ya que en una postura más radical pide congelar tarifas en
2017.
“El objetivo es darle clara perspectiva a los hogares, a los
trabajadores, los jubilados, las pymes, los comercios, de que no vamos a seguir
avanzando en el pedido de las grandes empresas de dolarizar las tarifas. Hay
una irritante presión a los gobernadores para que no se apruebe nada”, sostuvo
el ex ministro Axel Kicillof. El radical José Cano le reprochó que en el
gobierno anterior “se perdió el autoabastecimiento energético” y el macrista
Eduardo Amadeo acusó que “lo que estamos sufriendo es el desastre que dejaron
los que regalaban energía”. Nicolás del Caño (FIT) la emprendió contra Macri
ante el eventual veto y los “chirolitas de las petroleras”. Le salió al cruce
Laspina pidiendo “respeto” a los diputados. Anticipos de un duro debate en la
sesión.
Fuente: Abogados Tucumán