El vino hace a la historia colonial del norte argentino. La
bebida, que forma parte de la tradición
del valle calchaquí, seduce a tucumanos, turistas y enólogos del país con un
paisaje que atrapa por su panorámica compuesta por vides a 2.000 metros de
altura.
Con el fin de promover las 18 bodegas y más de 90 etiquetas
de vinos locales, el Gobierno de Tucumán, a través del Instituto de Desarrollo
Productivo (IDEP) y el Ente Tucumán Turismo en conjunto con la Cámara de
Bodegas y Viñedos de Tucumán, organizaron la Jornada de Vinos Tucumanos de
Altura, que fue coordinada por la periodista especializada, Elizabeth Checa; y
la enóloga, Marcela Rienzo.
Durante un encuentro celebrado en la sede del Idep, su
titular, Dirk Trotteyn; la vicepresidente del Ente Tucumán Turismo, Elena
Colombres Garmendia; y el bodeguero, Alberto Guardia, presentaron ante la
prensa a las referentes de la enología nacional.
Trotteyn expresó que dentro de la potencia productiva y
exportable tucumana, que reúne más de 160 productos que se envían a 150 países,
se encuentra el vino que tiene una fuerte tradición en la provincia. Dijo,
también, que este producto tiene jerarquía propia debido al impulso económico
que tiene como actividad productiva, más su potencial para el enoturismo.
“Se acercaron a la provincia dos técnicas muy tucumanas para
poder hacer una devolución que exprese la calidad del vino tucumano. Estamos
lanzando un informe para los principales mercados que es una herramienta muy
importante para que el sector explore nuevas alternativas comerciales”, dijo el
titular del IDEP, que remarcó que el mercado nacional conoce al vino tucumano.
Colombres Garmendia aseveró que la jornada pondrá en valor
uno de los productos tucumanos con mayor potencial turístico. “Significa la
posibilidad de generar propuestas para vivir una experiencia turística. Esto es
a lo que un destino aspira siempre porque el vino permite generar un recuerdo.
Eso posibilita tener en cuenta el lugar del que proviene”, remarcó, al tiempo
que destacó que los vinos tucumanos lograron diferenciarse porque tiene el
valor del terruño y de la Pachamama.
Checa expresó que los vinos tienen una identidad muy fuerte
que “primero hay que comunicársela a los tucumanos para que -la bebida- llegue
a las cartas de los restaurantes. Queremos que los tucumanos se enorgullezcan y
que los vinos lleguen a Buenos Aires y al mundo. Argentina es un gran viñedo y
Tucumán tiene una historia muy fuerte con el vino”.
Rienzo expresó que “los vinos tucumanos tienen una enorme
posibilidad porque son muy expresivos. Al consumidor les gusta eso porque no
quieren estar buscando la madera y esperando que la bebida se abra. Esto alejó
al vino de la gente”.
La enóloga, consultora de medios de comunicación y grandes
bodegas argentinas, dijo que el producto provincial tiene dos valiosas
oportunidades: “son vinos deliciosos y muy directos. Los consumidores están
todo el tiempo buscando perlas que tienen una calidad muy interesante”.
Proponen celebrar el Día del Torrontés
Checa y Rienzo propusieron que se celebre el Día
Internacional del Torrontés porque es una uva que sólo se encuentra en
Argentina: “Esta propuesta es una locura que estamos armando con Elizabeth
porque decimos que el malbec es una uva francesa que encontró en Argentina el
mejor lugar del mundo para desarrollarse. Pero, el torrontés, es el único
nuestro. Queremos festejar este día para que se celebre en Tucumán, en Buenos
Aires y en todo el mundo”.
Cifras del sector vitivinícola de Tucumán
-600.000 litros de producción total de vinos en Tucumán en
2017.
-50 hectáreas es la superficie plantada de uva malbec en al
área productiva.
-300.000 litros es la producción estimada de vino malbec en
el Valle Calchaquí.
-Tucumán cuenta con 18 bodegas que producen vinos a más de
2.000 metros de altura.
-Más de 90 etiquetas comercializan las bodegas locales.
-Del total de etiquetas, 31 corresponden a vinos malbec.
-Los vinos tucumanos se venden, principalmente, en el
mercado local y en Buenos Aires.
Fuente: Abogados Tucumán