Una especialista explica cuáles son las alternativas que
tiene un suscriptor si quiere salirse del sistema de ahorro en el que está
inscripto
En lo que va del año, los reclamos en la compra mediante
planes de ahorro de vehículos 0 km fueron creciendo en relación con el marcado
aumento de las cuotas.
Al momento de elegir comprar un vehículo mediante el sistema
de planes de ahorro hay que tener presente que el valor de la cuota es móvil.
Es decir que el monto total del auto se va modificando de
acuerdo al precio de lista oficial y, en consecuencia, también va cambiando el
valor de la cuota que se paga mensualmente.
Cuando las cuotas son pagadas fuera de término, las
administradoras pactan, generalmente por contrato, que podrían cobrar la cuota
al valor vigente a la fecha de pago.
“La sugerencia es pagar las cuotas en la fecha de
vencimiento así les reintegran la alícuota pura pagada con una penalidad del 2%
y no exponerse al cobro de un 4 % de multa sobre los haberes aportados en caso
de adeudar más de 3 cuotas y el auto aún no fue entregado”, explica la
especialista en derecho del consumidor, Silvana Alonso.
En caso de haber retirado el vehículo, la situación es más
compleja porque la administradora del plan se convierte en un acreedor
prendario. Si advierte que hay atrasos en los pagos tiene la posibilidad de
iniciar un juicio para secuestrar la unidad y reclamar toda la deuda.
Aumento de las cuotas por sustitución o discontinuación de
un modelo
En los casos en los que el fabricante cambia la versión del
vehículo o el modelo, la administradora del plan comenzará a adjudicar estas
nuevas unidades.
Esto llevará a que el valor móvil total del vehículo se
modifique pero nunca puede superar el 20 % del precio vigente al cese de la
fabricación del vehículo que se había contratado en el plan, indicó la
especialista en derecho del consumidor al diario Clarín.
Este hecho producirá que cambien las cuotas mensuales que
deberán pagar los compradores que están en el grupo. Si se prescinde el
contrato sólo se devuelve parte del monto acumulado de la cuota pura.
Si alguno de los integrantes del grupo no está de acuerdo
con el cambio de versión o modelo, tiene que informárselo a la administradora
del plan quien deberá reintegrar las cuotas puras abonadas sin poder cobrarle
ninguna penalidad.
Es decir que no se debe pagar ninguna multa pero sólo será
reintegrado lo que se fue pagando específicamente por el modelo, sin incluir lo
que se abonó en gastos administrativos, seguro de vida e impuestos, que puede
representar más del 30 % en una cuota.
Para el caso que el fabricante decida discontinuar el
vehículo y no lo reemplace por ningún otro la administradora deberá notificar a
todos los compradores para que decidan por mayoría absoluta el cambio a otro
vehículo o la liquidación del grupo.
¿Cómo se puede terminar un contrato de plan de ahorro?
Para aquellos que decidan renunciar al plan y no hayan
retirado el auto, deberán estar al día en las cuotas y notificarlo a la
administradora del plan mediante nota sellada o carta documento.
En estos casos se le deberá reintegrar al suscriptor que se
sale del plan las cuotas puras abonadas con una penalidad del 2 %, pero recién
cuando se liquide el grupo al que pertenece. Un plan de ahorro es un sistema de
pago que comprende 84 meses.
En caso que el comprador se atrase en más de 3 cuotas se
dará por resuelto el contrato y le devolverán la cuota pura aportada, también
cuando finalice todo el grupo, pero descontándole el 4 % como sanción por el
atraso.
En estos casos tampoco se devolverán los montos
correspondientes a los gastos administrativos, seguro de vida e impuestos.
Estas dos opciones no pueden ser ejercidas si el vehículo ya
fue retirado porque cuando se hizo la entrega el administrador firma un contrato
prendario además del plan.
Por ello, en un caso así, la opción es la cancelación total
del plan de manera anticipada para poder terminar antes y que las cuotas no se
sigan incrementando. De todas maneras, siempre hay que evaluar el caso
específico.
Fuente: Abogados Tucumán