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Síndrome recesivo: aumentan las consultas de empresas para entrar en concurso preventivo

Síndrome recesivo: aumentan las consultas de empresas para entrar en concurso preventivo

Un viejo fantasma está regresando al ámbito de los negocios: en la medida que se profundiza el deterioro en la cadena de pagos y se hace difícil cumplir con las obligaciones financieras, cada vez más empresas recurren a los pedidos de concursos preventivos de acreedores y de quiebras ante la Justicia.

Los estudios legales especializados en la materia estiman que esta práctica ya sufrió un incremento de, al menos, un 15% respecto de un año atrás, pero advierten que lo más grave todavía está por verse.

Como los casos que se están llevando adelante son anteriores a la devaluación sufrida entre abril y septiembre, los expertos creen que el impacto pleno de la crisis aún no se sintió, y que hay altas probabilidades de que el número de concursos preventivos crezca en las próximas semanas.

El detonante de los problemas de insolvencia de las empresas fue, naturalmente, la combinación de la devaluación del peso, el encarecimiento del financiamiento privado y el entorno recesivo. El pronóstico es sombrío: si no bajan las tasas y el mercado se sigue reprimiendo, la previsión que hacen los analistas es que las empresas se terminarán "comiendo" los stocks.

Los asesores de empresas consultados por este medio coinciden en señalar que las grandes deudas de sus clientes se generan en dos ámbitos: el tributario y el laboral.

En el primero, por la presión tributaria –a la que consideran insostenible- y los juicios laborales, que por la aplicación de las tasas de interés vigente, hace que las sentencias se transformen en impagables.

El especialista Eduardo Favier Dubois, titular del estudio Favier Dubois & Spagnolo, destaca que en el aspecto tributario también empiezan a surgir cuestiones penales, porque si -por ejemplo- no se realizó el pago de los aportes, el empresario puede terminar en la cárcel, ya que está cometiendo un delito.

Lo cierto es que el aumento en las consultas de empresarios que quieren concursarse ya es una realidad palpable en el día a día de los estudios jurídicos.



Fuente: Abogados Tucumán