La producción sustentable, materiales reciclables y diseños
originales. Estas son las consignas que comparten los jugueteros tucumanos. En
estas fiestas, desde el Instituto de Desarrollo Productivo de Tucumán (IDEP)
compartimos los trabajos de cuatro diseñadores de juguetes locales que, además
de promover lo lúdico, utilizan materiales reciclables en todos sus productos.
Acercar es una iniciativa de Rodrigo Duloc y de Cristian
Mazzocato, creadores de Rooled, una caja hecha de MDF que produce estímulos
visuales y sonoros con luces LED y un pequeño parlante. La caja puede contener
diversos materiales con variedad de texturas, desde yerba, polenta y arena,
hasta cartón.
“Nuestro invento es tan llamativo para ellos como un
celular, con la diferencia de que pueden realizar manualidades”, señala
Rodrigo. El Rooled puede ser utilizado por niños desde los 2 años para
estimular su desarrollo sensorial; a partir de los 3 años colabora con la etapa
sensoriomotora y desde los 5 años, con la cognitiva.
Carlos Ledesma, creador de RetroBot, también utiliza
material reciclado para recrear muñecos de su infancia: Transformes, Maginzer Z
y Robotech. Él utiliza tapas de botella, palitos de helado y de chupetín,
porcelana fría, cartón, entre otros elementos. “La razón por la que uso esos
materiales es para concientizar en los niños el reciclaje y el uso responsable
de los materiales con los que tienen contacto diariamente, además de hacer que
la enseñanza no pierda su sentido lúdico”, explica.
La Itinerante, de Leonor Glikman y Marcela Ponce, fabrica
juguetes y juegos de mesa que son hechos con madera tucumana. “El principal
atributo que tienen los juguetes de madera es la durabilidad y que puede ser
restaurada”, destaca Leonor. Ellas se abastecen de madereras de San Miguel de
Tucumán y Tafí Viejo y, con ella, crean 15 productos: desde juegos clásicos
como Tangram, Tatetí, Torre de Hanoi y Zenku, hasta un teatrillo de títeres,
cubos y formas para armar figuras, todos de alta durabilidad.Carnavalito
Crochet
Otros juguetes que pueden pasar de generación en generación
son los creados por Carnavalito, una marca de Florencia Argañaraz. Ella crea
muñecos con formas humanas y animales típicos del norte argentino: llamas,
quirquinchos, zorros, vacas. La producción se hace a pedido con lana y algodón
comprados a distribuidores tucumanos.
Fuente: Abogados Tucumán