La declaración de rebeldía para
el fiscal Carlos Stornelli en el expediente que sigue adelante el juez federal
de Dolores Alejo Ramos Padilla, implica dos caminos paralelos: en los términos
institucionales, pedirle el jury ante el Procurador General de la Nación. En
los términos prácticos, impedirle a la defensa el acceso a la causa en la que
está imputado y en la que fue llamado a indagatoria.
"Vamos a apelar la decisión.
Esto implica no poder acceder a la causa. Esa es la consecuencia que trae, pero
Stornelli tomó la decisión de no participar en el proceso. Yo no puedo
intervenir ni presentar escritos", admitió el abogado Roberto Ribas,
defensor de Stornelli.
Es que el propio Ramos Padilla lo
dijo expresamente en su resolución de 28 páginas que firmó este miércoles en
donde repasó las pruebas contra Stornelli, las mismas que le hubiera leído si
se hubiera presentado a indagatoria. "Mientras subsista la rebeldía no
puede haber diálogo procesal posible", afirmó el juez.
Lo único que podrá apelar ahora
es esta declaración de rebeldía sin poder controlar qué es lo que sucede en la
causa e impugnar las medidas que puedan llegar a afectarlo
El juez añadió: "Se agregará
constancia de lo aquí resuelto en cada una de las incidencias en las que el
encausado Stornelli participe y no se le dará tratamiento a sus peticiones hasta
tanto decida ponerse a derecho y celebrar la audiencia indagatoria a la que ha
sido convocado en varias oportunidades".
"Claro está que si el
imputado se pusiera a derecho y se presenta a la audiencia fijada, se habrá de
dejar sin efecto la declaración de rebeldía que aquí se dispone y se habrán de
sustanciar y resolver todas sus peticiones y planteos, tal y como hasta el
momento venía sucediendo en este proceso judicial", afirmó Ramos Padilla
en la resolución a la que accedió Infobae.
Por lo pronto, Ramos Padilla
declaró la rebeldía de Stornelli luego de que faltara a tres citas a
indagatorias y dispuso poner en conocimiento del procurador Eduardo Casal y
solicitarle que "arbitre los medios necesarios para que adopte las medidas
necesarias para garantizar la comparecencia del fiscal Stornelli en este
proceso".
Al tener fueros, la posibilidad
de detención como en el caso de cualquier otra persona no está considerada en
este caso. Una experiencia similar es la que vivió años atrás el fiscal Carlos
Gonella, allegado a la procuradora Alejandra Gils Carbó, en un proceso por
violación de secretos que llevaba en su contra el juez Claudio Bonadio. En
aquel momento, Bonadio no solo dispuso pedir el juicio político sino que
también le prohibió a Gonella la salida del país.
Stornelli estaba citado a las 12
del mediodía del martes en Dolores y, aunque hasta último momento jugó al
misterio, en Comodoro Py era un secreto a voces que no iría. "Mejor
rebelde que procesado", decían en voz baja en algunos pasillos del edificio
de Retiro.
Es que el solo hecho de
presentarse a la indagatoria, más allá de las explicaciones que diera, ponía a
Stornelli en la situación de cualquier otro indagado que sortea una
indagatoria: la definición de una situación procesal en donde aparece la
posibilidad de un procesamiento, un sobreseimiento o una falta de mérito. En el
entorno de Stornelli descreían de la posibilidad de que Ramos Padilla lo
llamara a declarar para desvincularlo del expediente.
La decisión de declararlo en
rebeldía no deriva en un pedido de detención porque el fiscal tiene fueros. No
obstante, la resolución de Ramos Padilla ya fue informada a la Procuración
General de la Nación para que se analice iniciar un pedido de jury contra el
fiscal de la causa de los cuadernos.
La defensa ahora buscará que un
tribunal superior a Ramos Padilla revoque esa medida. En la puerta del juzgado,
Ribas insistió en las sospechas de Stornelli sobre las acusaciones en su contra
y la vinculación con la causa de los cuadernos. "Este juzgado no nos ofrece
ni mínimas garantías", le dijo a los periodistas.
Fuente: Infobae