Jorge “Yito” Contrera es
abogado y escribano recibido de la Facultad de Derecho de la U.N.T, además es
humorista y trabaja en radio.
“No sé si uno
nace abogado, sino que lo van condicionando desde chico”, comentaba Contrera.
Desde chico ya decía que iba a ser abogado,
por más que nadie de su familia lo era. Contó que siempre le interesó las
cuestiones generalistas y la carrera de abogacía tiene eso. Además, dijo que le
favoreció haber tenido una educación pública para tener una visión más social
en su profesión.
“La facultad me
dejó amigos entrañables, entendí que tenía que estudiar para aprender y no para
aprobar; y tiene excelentes docentes”, afirmó.
Aunque lo
negativo fue que se le dificultó al cursar las materias de Derecho político,
Derecho Administrativo, y Filosofía del derecho.
Su carrera
artística y humorística comenzó cuando se lesionó jugando al tenis: ”por 3
meses no pude hacer nada. Un día vi que los chicos de “Tucson Comedy” daban un taller de standup, que duraba justamente
los mismos meses, y me anoté”
A partir de allí
se unió al grupo y ya lleva 6 años de realizar esta actividad. Yiyo expresó
que “más allá que tus amigos vean tu
gracia, es increíble que lo vea y aprecie otra gente”.
Hay un hecho que
lo marcó: “en el día del abogado, dos abogados se me acercaron y me dicen: nos
mostrás que hay otra cosa después del derecho, que podés divertirte. Y eso me llamó mucho la atención”
A su vez, es
miembro del programa radial “No somos
gente fina”. Sostuvo que allí trata de buscar que la gente escuche
contenidos que la dejen de saturar.
“Es muy lindo
esto para los abogados, tienen que buscar una actividad alternativa, para no
quedarse en solo lo que implica la profesión”
Como si no fuera
suficiente para este inquieto abogado, gracias a la idea de un amigo comenzó un
emprendimiento, el de “las bodas con
humor”, que es la representación de un casamiento civil, pero con humor. En
donde juega el papel de juez de paz y hace divertir a los invitados.
“La profesión te
da una visión periférica que hay que aprovechar, todos creen que el abogado
tiene plata, pero no es tan así, tenemos que lidiar con los casos y tiempos del
proceso”, dijo.
Afirmó que el humor
permite decir verdades: “tengo la gracia y puedo decir cosas que a la gente no
le enojan. Te deja causar ese cambio de energía para estar mejor”
Fuente: www.abogadostucuman.com