
La ansiedad no entiende ni de sexos ni de
edad. Son esos ataques que dan, en pleno período de estrés, o cuando este ha
terminado, totalmente paralizantes y muy desagradables.
Pero,
a pesar de lo que muchas veces podamos pensar, un pico de ansiedad,
totalmente controlado no es malo, al contrario, es uno de los mecanismos
defensivos más potentes que tiene el cuerpo.
Básicamente, es un sistema de alerta ante una
situación que se percibe como una amenaza, todas las personas lo tienen,
lo que pasa es que, unos lo desarrollan de forma más potente que otros,
y, si se sabe gestionar de forma correcta, es un proceso que ayuda a
adaptarse a las nuevas exigencias, mejorar el rendimiento de una persona y,crea
un mejor sistema de capacidad de anticipación o respuesta ante un acto. Con la
ansiedad, lo que consigue el organismo es tener al ser humano alerta, dispuesto
a prever riesgos o amenazas, y actuar ante ellos, para, así bajar sus
consecuencias. Este síntoma es el que ha ayudado al ser humano a adaptarse a
los continuos cambios, o afrontarlos de la mejor manera, convirtiendo a la
persona en lo que es hoy en día.
Pero, si es real que, hay personas que no saben
gestionar bien estos sentimientos, o bien funciona de forma alterada, y, causa
graves problemas de salud, presentándose como incapacitante, y esto viene
marcado por diversos factores:
·
Factores biológicos, o genéticos. Muchas veces, la
biología juega una mala pasada, y, una serie de componentes genéticos, la falta
o la superproducción de algunas sustancias naturales hacen que la ansiedad
tenga picos mucho más altos de lo normal, y con muy mala gestión de ellos.
·
Factores de la personalidad. Fundamentales, la
persona es quien es, por su personalidad, y su capacidad de afrontar los
problemas, por ello, una persona débil, o que se hunda fácilmente, un ataque de
ansiedad puede resultar totalmente nocivo, o si no se tienen herramientas para
afrontar el estrés generado en el día a día, este se puede disparar, creando
ataques de ansiedad.
·
El estilo de vida también afecta. Hoy en día
llevamos una vida poco organizada, en la que no se dedica el tiempo suficiente
a descansar o comer en condiciones, además de pasar demasiadas horas de cara a
estímulos visuales y sonoros lo suficiente fuertes para desestabilizar los
niveles de estrés de mucha gente.
Por
ello, hay que conocer los síntomas de la ansiedad, y, tener herramientas
para, paliar los ataques, o, si se puede, hacer desaparecer de manera total los
poblemas asociados que llevan. Algunos de estos trucos son:
·
El deporte. Es una de las mejores maneras para
gestionar tanto los picos de ansiedad como para prevenirlos.
·
Una alimentación equilibrada, en la que abunden la
fruta y la verdura fresca.
·
No abusar de bebidas alcohólicas, con cafeína o con
azúcar añadido. Estas bebidas son desencadenantes de muchas de las crisis
de ansiedad, si se consumen en gran medida.
Dormir ocho horas es clave, además como no contar con estímulos sonoros o luces
fuertes cerca del lugar de descanso.
·
Yoga, pilates o alguna disciplina donde se enseñe
a controlar la respiración, siendo clave para conseguir parar las crisis.
Fuente: https://www.revistabuenasalud.es/ansiedad-que-es-y-como-se-puede-prevenir/