Hace años la ciudad de Rosario, provincia de Santa Fe,
es conocida por ser uno de los puntos más calientes en el país. Hechos
vinculados al narcotráfico, asesinatos por parte de sicarios, robos y
extorsiones, con la complicidad policial, llenaron desde hace tiempo las tapas
de los diarios, que hoy, ya están un tanto más acostumbrados a convivir con
estas organizaciones. En pocas palabras, lamentablemente algo de todo esto se
normalizó.
Las estadísticas que emitió la Procuraduría de
Narcocriminalidad (PROCUNAR), bajo la titularidad de Diego Alejo Iglesias, son
sin dudas preocupantes. En la ciudad santafesina hubo, durante el periodo 2020,
1833 causas vinculadas a la Ley de Drogas 23.737 y la gran mayoría investigan
en narcotráfico en la ciudad.
De esas causas, el 59 por ciento, tiene que ver con
"causas de gravedad compleja". Pero a estos datos cabe hacerle un
análisis: el 36 por ciento de los recursos son destinados a personas que
transitan con la cantidad de uno a cinco porros en el bolsillo, denominados
"tenencia personal o tenencia para consumo".
Esta cifra es similar a los datos de la justicia
federal de Comodoro Py donde también se produce una persecución del consumidor
pequeño que se traduce en estas estadísticas, es decir, que el conjunto de las
causas "de consumidores" roza el 40 por ciento: el 21 por ciento se
trata de "tenencia simple", y el 15 por ciento es por "tenencia
personal".
El incremento de causas por comercio de
estupefacientes fue de la mano en 2020 del crecimiento de los homicidios en la
ciudad más poblada de la provincia de Santa Fe. En el mismo periodo analizado,
se registraron al menos 212 asesinatos, de los cuales, según el Observatorio de
Seguridad Pública (OSP) de Santa Fe, la mitad tuvo como motivo, o estaba
vinculado, al narcotráfico o negocios ilegales.
Investigación
de las redes de tráfico de drogas
Voces allegadas a PROCUNAR enumeraron tres posibles
problemas en el correcto tratamiento de este tipo de delitos en una zona
"caliente". El primero es que hay solo tres fiscalías -sencillamente
no dan a basto -, el segundo es que los juzgados delegan todas las causas y
tercero es que el abordaje debería ser de multicompetencia, es decir, los
delitos no son solamente vinculados al tráfico de drogas.
En Rosario, hoy en día los que se encuentran en las
calles son los segundas y terceras líneas -principalmente estos últimos-
quienes son los que realizan el tráfico de estupefacientes. Pero no terminan
ahí, la forma en que adquieren dinero vincula a las organizaciones con la
apuesta ilegal, las extorsiones, robos y secuestros. Las primeras líneas, como
antes eran Los Monos o Funes-Ungaro, están judicializadas y con condenas.
A la Justicia esto le decanta en un problema complejo,
el de la ramificación. Por cada uno que se logra detener, según fuentes
judiciales, aparece otro. Este esquema trae aparejado otro, el de la violencia
cotidiana por acaparar y hegemonizar distintas zonas de la ciudad. Aun así,
está comprobado que las bandas operan en muchos lugares al mismo tiempo.
En este caso, la PROCUNAR opera para unir los
personajes aislados y formular imputaciones como organizaciones delictivas
vinculadas al narcotráfico en la ciudad y también en la provincia santafesina.
Para que un homicidio sea investigado por la justicia federal, primero tiene
que haber un juez federal pida o un fiscal provincial "diga" que ese
causa tramite en el fuero federal, pero según pudo averiguar Tiempo Judicial,
en la realidad no pasa.
Además, otro de los análisis que caben dentro de la
temática, que también se vincula al momento económico de caída libre hace
varios años y una pandemia que agravó más la situación, es que el fenómeno del
microtráfico está vinculado con la imposibilidad de generar un trabajo genuino.
No es difícil imaginar que muchas personas caen en manos de las bandas para
generar algún tipo de ingreso.
En esa sintonía, también hay que mencionar que muchos
detenidos pertenecían a las fuerzas de seguridad. La policía de la ciudad está
señalada por trabajar en complicidad con las bandas narcos, tal es el caso de
Alejandro Druetta, ex jefe policial de Santa Fe.
Soluciones
Este año hubo una reunión en Rosario, donde todos los
actores del sistema judicial y las fuerzas de seguridad firmaron acuerdos para
el trabajo en conjunto. Básicamente, lo que se propuso para este año es el
trabajo de inteligencia criminal: realización de análisis, ver puntos en común,
los puntos calientes del territorio, los nombres, las fechas y los lugares.
Además, deberá existir la coordinación de las investigaciones, la transmisión de la información. Esencialmente, lo que se busca es que no se duplique la aplicación de recursos para la misma investigación, y que las investigaciones traigan consigo un poco de paz para los vecinos de Rosario.
Fuente: http://tiempojudicial.com/2021/04/08/rosario-el-60-de-las-causas-por-drogas-son-por-trafico-y-no-por-consumo-personal/