Una mujer asegura que tres hombres intentaron raptar a su hija de 14 años en la avenida Juan B. Justo al 2.300. La Policía aseguró que la denunciante se asustó cuando un taxista, que llevaba a un no vidente, se paró para que le indicara dónde quedaba una calle. El caso se terminará de esclarecer en la Justicia.
Una mujer denunció que tres hombres intentaron
secuestrar a su hija. La Policía, en cambio, sostiene que se trató de una
enorme confusión, ya que en realidad un taxista que llevaba a un no vidente
sólo se arrimó a ellas para pedirle una dirección. El caso generó un enorme
revuelo en la provincia.
Loreta María José Veliz Ortiz es la denunciante.
Dijo que el supuesto ataque ocurrió el miércoles a la noche, entre las 20.30 y
las 21, a la altura de avenida Juan B. Justo al 2.300. A esa hora, ella y
Lorena Daiana Pedraza regresaban del centro en un colectivo de la Línea 11.
Ambas se bajaron del ómnibus en la esquina de avenida Juan B. Justo y Warnes,
para caminar desde allí hacia su casa, ubicada a unas cuantas cuadras del
lugar, en el barrio Ciudadela Norte.
Madre e hija comenzaron a caminar por la calle
debido a que en ese sector se encuentra el cementerio israelita, que tiene las
veredas altas. “Hacemos un trecho de dos o tres metros y ahí dobla un taxi que
venía por la avenida y se nos tira encima”, recordó Veliz Ortiz. De acuerdo con
su relato, el auto era un Fiat Uno en el que viajaban tres personas.
“El que iba adelante le dice al de atrás ‘¡ahí
está, ahí está!’ Y el de atrás abre la puerta y la manotea a mi hija para
meterla en el auto. Mi hija me dijo ‘¡ay, mamá!’ y se agarró el pecho. Entonces
la agarré fuerte, forcejeamos, salimos corriendo y nos metimos en un gimnasio
que está al frente”, contó la mujer. Mientras ambas corrían desesperadas, el
auto avanzaba por Warnes hasta perderse en el horizonte. “De los nervios, nunca
vi la patente ni la numeración de la puerta del auto. Pero sí me quedó grabada
la imagen del tipo que abrió la puerta de atrás”, dijo la mamá de la víctima.
Cuando madre e hija ingresaron al gimnasio, las
personas que estaban allí se solidarizaron con ellas. Una empleada del lugar
recordó que la jovencita estaba tan asustada que no podía pronunciar palabra.
Le dieron agua con azúcar para que se calmara y recién rompió en llanto minutos
después, cuando su padre fue a buscarla y la envolvió con sus brazos. Su madre,
que temblaba de miedo, se había encargado de llamar a la Policía desde su
celular.
Otra versión
Un móvil del servicio 911 llegó poco después. “Los
agentes se contactaron con la víctima y después de tener los primeros datos,
comenzaron a buscar al taxi. Lograron ubicarlo y lo detuvieron”, explicó el
comisario Daniel Brandán, jefe del centro de monitoreo.
“El chofer del vehículo -agregó- contó otra
versión. Él dijo llevaba un pasajero no vidente a una dirección del pasaje
Naranjo. Como no lo encontraron, por una cuestión de cortesía, decidió bajarse
y preguntar dónde quedaba esa calle. La mujer se asustó y salió corriendo a los
gritos. El chofer no dijo nada y siguió el viaje”, relató.
Brandán explicó que los agentes no sólo se quedaron
con esa versión. “Fueron hasta el lugar y comprobaron los dichos del taxista.
Luego de identificar a los ocupantes del vehículo, regresaron al gimnasio y le
explicaron a la mujer todo lo que había sucedido. Ella se calmó y los agentes
volvieron a realizar su función, pero luego realizó la denuncia”, informó.
El comisario destacó que ya remitieron toda la
documentación -datos de los ocupantes del automóvil y audios del procedimiento
que realizaron por este caso- sobre la intervención de los agentes a la
seccional 5a, donde la madre de la adolescente realizó la denuncia, y anunció
que se presentaría a aportar los datos para que hicieran un retrato hablado,
medida que hasta el cierre de esta edición no se había concretado.
“Todo será enviado a la Justicia para que determine
cómo continuará la investigación”, concluyó Brandán.
La fiscala Adriana Reinoso Cuello, que está de turno,
dijo, al cierre de esta edición, que espera que le llegue a sus manos la causa
para analizar cuáles serán los pasos que tomará después de que ambas partes
ratifiquen la denuncia.
“Shockeada”
Ya en su casa, Lorena Daiana seguía asustada. “Mi
hija quedó shockeada”, comentó su madre. “Ella va a una escuela de acá a dos
cuadras. Siempre iba y volvía sola, pero ahora voy a ir yo a retirarla porque
no la dejo más sola”, remarcó la mujer, atemorizada.
“Querían
llevársela”
Véliz Ortiz cree que esos hombres que iban en el
taxi pretendían llevarse a su hija para abusar sexualmente de ella o para
entregarla a una red de trata de personas. “Para mí, querían llevársela y
hacerle algo malo. Lo que pasa es que es una chica bonita: rubia, de ojos
claros y baila árabe. La pueden haber visto en el Facebook y capaz que por eso
la seguían”, intentó explicarse a sí misma.
Pero el miedo persiste en esa zona de la capital.
Priscila Véliz, la tía de la adolescente, aseguró que las madres del barrio
están alertas desde hace un tiempo por la presencia de vehículos extraños.
“Acá se comenta que hay dos autos que rondan por el
barrio en actitud sospechosa: uno gris y otro rojo, los dos con vidrios
polarizados. También se dijo una vez que desde uno de esos autos les sacaban
fotos a los chicos que jugaban en una canchita, al lado de la escuela”, agregó
la mujer, preocupada.
De la misma manera se expresó una profesora del
gimnasio donde buscaron refugio Lorena Daiana y su madre. “No nos sorprende que
una cosa así pase por acá; siempre se comenta que andan autos con vidrios
oscuros merodeando”, se limitó a comentar.
“Nerviosismo”
El comisario Dante Bustamante, jefe de la Policía,
aseguró que en la comisaría de la zona ni en ninguna del ámbito de la Unidad
Regional Capital se recibieron denuncias sobre tentativas de secuestro ni sobre
la presencia de personas extrañas. “Estamos preocupados por el nivel de
nerviosismo que está mostrando la gente en este tipo de casos”, sostuvo el
comisario general.
Investigación
I
Intentan identificar el taxi en el que habrían
secuestrado a un joven el sábado
La fiscala Adriana Reinoso Cuello intenta tratar de
dar con el taxi Fiat Uno en el que habrían secuestrado a Nicolás Zárate. El joven
denunció que el sábado a la madrugada, se subió a ese vehículo y que aceptó
compartir el viaje con un amigo del chofer. Dijo que compraron una cerveza en
un drugstore y que lo drogaron porque sólo recuerda haberse despertado en un
cañaveral de Los Aguirre. Los investigadores tratan de confirmar por qué lo
privaron de su libertad, ya que descartaron la hipótesis del robo. A la
víctima, según consta en las actuaciones, le quitaron el celular, pero no el
dinero que tenía en la billetera. Tanto en la Justicia como en la Policía se
espera que se presenten testigos para ayudar a esclarecer el hecho.
Investigación
II
El caso de
la joven secuestrada y abusada entró en una etapa de definiciones
Mientras la joven que fue secuestrada y abusada se
recupera lentamente, la Justicia intenta sumar pruebas en contra de los tres
hombres que están detenidos por el caso. En las próximas horas La fiscala
Adriana Giannoni recibirá informes que pueden determinar el lugar donde fue
llevada la chica durante el tiempo que estuvo raptada. Esos datos los
conseguirá a través del celular de la víctima. Por otra parte, aún no se
definió el día en el que la chica intentará identificar a los acusados a través
de una rueda de reconocimiento. Giannoni adelantó que en las próximas horas
pedirá que se le dicte la prisión preventiva al trío y a la mujer que fue
detenida por los robos que cometieron previo al secuestro.-
Para tener
en cuenta
Aunque sea difícil y genere reacciones, averigüe
dónde concurrirá su hijo cuando decide salir de noche.
Si su hijo sale de noche, pídale que regrese junto con sus amigos.
Siempre es más seguro transitar en grupo que solos.
Trate de tener en su agenda los números de
teléfonos de los amigos de sus hijos y de sus padres por cualquier emergencia.
Pídale a su hijo que se comunique cuando esté por
volver a casa. Trate de que le comente en qué y con quién volverá de su salida.
Si su hijo decide volver a casa en taxi, debe
identificar la licencia y en lo posible, comunicarla a algún familiar.
Recomiéndele a su hijo a que se acostumbre a no
tomar taxis en la calle, sino que los pida por teléfono a las empresas.
Si su hijo demora en llegar, no se desespere.
Averigue dónde puede estar. Es clave tener los números de teléfonos de sus
amigos.
Realice la denuncia policial una vez que está
seguro de que algo malo le pasó. Una falsa alarma puede costarle mucho a otra
persona.
Recomiende a su hijo que, ante cualquier problema,
se comunique al servicio 911 para que reciba ayuda de manera inmediata.
Aconseje a su hijo a visitar lugares desconocidos y, muchos menos, si lo hace solo. Esté atento a sus conductas.
Fuente: http://m.lagaceta.com.ar/nota/678228/policiales/denuncia-intento-secuestro-genero-revuelo.html